La Familia de la Iglesia: El Laboratorio de Amor
por Rick Warren
“Todos ustedes en conjunto son el cuerpo de Cristo, y cada
uno de ustedes es parte de ese cuerpo.” 1 Corintios 12:27 (NTV)
La familia de la iglesia te saca del aislamiento egocéntrico. La iglesia local es el salón de clase para aprender a llevarse bien en la familia de Dios. Es el laboratorio para practicar el amor desinteresado.
Como miembro participante, aprendes a preocuparte por los demás y compartir las experiencias de los demás: "Si uno de los miembros sufre, los demás comparten su sufrimiento; y si uno de ellos recibe honor, los demás se alegran con él" (1 Corintios 12:26 NVI).
Sólo en contacto regular con lo común y corriente, los creyentes imperfectos podemos aprender la verdadera comunión y experimentar la verdad del Nuevo Testamento de estar conectados y dependiendo los unos de los otros.
El compañerismo bíblico es estar comprometidos el uno al otro como estamos con Jesucristo. Dios espera que demos la vida por los demás. Muchos cristianos conocen Juan 3:16 pero desconocen 1 Juan 3:16: "Jesucristo entregó su vida por nosotros. Así también nosotros debemos entregar la vida por nuestros hermanos" (NVI).
Esta es la clase de sacrificio que Dios espera que demuestres a otros creyentes - una disposición a amarlos en la forma en que Jesús te ama.
Reflexión
¿Cuál es la evidencia en tu vida de tu compromiso con la comunión bíblica?
¿Con qué frecuencia interactúas y tienes comunión con tu familia de la iglesia en la iglesia? Y ¿Fuera de la iglesia?
por Rick Warren
“Todos ustedes en conjunto son el cuerpo de Cristo, y cada
uno de ustedes es parte de ese cuerpo.” 1 Corintios 12:27 (NTV)
La familia de la iglesia te saca del aislamiento egocéntrico. La iglesia local es el salón de clase para aprender a llevarse bien en la familia de Dios. Es el laboratorio para practicar el amor desinteresado.
Como miembro participante, aprendes a preocuparte por los demás y compartir las experiencias de los demás: "Si uno de los miembros sufre, los demás comparten su sufrimiento; y si uno de ellos recibe honor, los demás se alegran con él" (1 Corintios 12:26 NVI).
Sólo en contacto regular con lo común y corriente, los creyentes imperfectos podemos aprender la verdadera comunión y experimentar la verdad del Nuevo Testamento de estar conectados y dependiendo los unos de los otros.
El compañerismo bíblico es estar comprometidos el uno al otro como estamos con Jesucristo. Dios espera que demos la vida por los demás. Muchos cristianos conocen Juan 3:16 pero desconocen 1 Juan 3:16: "Jesucristo entregó su vida por nosotros. Así también nosotros debemos entregar la vida por nuestros hermanos" (NVI).
Esta es la clase de sacrificio que Dios espera que demuestres a otros creyentes - una disposición a amarlos en la forma en que Jesús te ama.
Reflexión
¿Cuál es la evidencia en tu vida de tu compromiso con la comunión bíblica?
¿Con qué frecuencia interactúas y tienes comunión con tu familia de la iglesia en la iglesia? Y ¿Fuera de la iglesia?
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