Fiel hasta la muerte
Lectura: Apocalipsis 2:8-11
No temas en nada lo que vas a padecer. […]. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida. —Apocalipsis 2:10
La Galería de Arte Walker, en Liverpool, Inglaterra, exhibe un cuadro de un soldado romano que vigila con lealtad la antigua Pompeya. Está inspirado en un descubrimiento arqueológico en esa ciudad de un soldado romano con toda su vestimenta militar y cubierto de cenizas. La erupción del volcán Vesubio, en el 79 d.C., cubrió la ciudad de lava y atrapó en un instante a la gente y su cultura. La pintura Fiel hasta la muerte da testimonio de la permanente vigilia del centinela, aun cuando a su mundo lo envolvía una muerte atroz.
La iglesia de Esmirna (una congregación del siglo I perseguida por creer en Cristo) fue desafiada a permanecer fiel hasta la muerte. El Señor no había pasado por alto su consagración espiritual (Apocalipsis 2:9). Y para el sufrimiento que sobrevendría, Jesús la alentó diciendo: «No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados […]. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida» (v. 10).
El Señor comprende lo que estamos atravesando ahora y lo que enfrentaremos en el futuro. Aunque en este mundo haya sufrimiento, Él promete vida eterna a sus hijos. Con su fortaleza, podemos ser fieles hasta la muerte (Filipenses 4:12-13).
—WEC
Nuestra fe tal vez sea probada para que confiemos en la fidelidad de Dios.
No temas en nada lo que vas a padecer. […]. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida. —Apocalipsis 2:10
La Galería de Arte Walker, en Liverpool, Inglaterra, exhibe un cuadro de un soldado romano que vigila con lealtad la antigua Pompeya. Está inspirado en un descubrimiento arqueológico en esa ciudad de un soldado romano con toda su vestimenta militar y cubierto de cenizas. La erupción del volcán Vesubio, en el 79 d.C., cubrió la ciudad de lava y atrapó en un instante a la gente y su cultura. La pintura Fiel hasta la muerte da testimonio de la permanente vigilia del centinela, aun cuando a su mundo lo envolvía una muerte atroz.
La iglesia de Esmirna (una congregación del siglo I perseguida por creer en Cristo) fue desafiada a permanecer fiel hasta la muerte. El Señor no había pasado por alto su consagración espiritual (Apocalipsis 2:9). Y para el sufrimiento que sobrevendría, Jesús la alentó diciendo: «No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados […]. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida» (v. 10).
El Señor comprende lo que estamos atravesando ahora y lo que enfrentaremos en el futuro. Aunque en este mundo haya sufrimiento, Él promete vida eterna a sus hijos. Con su fortaleza, podemos ser fieles hasta la muerte (Filipenses 4:12-13).
—WEC
Nuestra fe tal vez sea probada para que confiemos en la fidelidad de Dios.
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