sábado, 8 de septiembre de 2012

Tú Eres Aceptado
por Rick Warren
“Pero ustedes son linaje escogido, real sacerdocio, nación
santa, pueblo que pertenece a Dios, para que proclamen
las obras maravillosas de aquel que los llamó de las
tinieblas a su luz admirable.” (1 Pedro 2:9 NVI)
La mayoría de nosotros invierte toda su vida tratando de ganar aceptación. Queremos conseguirla de nuestros padres, parejas, compañeros en la vida, personas que respetamos, y hasta de las que envidiamos. El deseo de ser aceptados nos mueve a hacer todo tipo de cosas. Puede influenciar el tipo de ropa que usamos, la clase de auto que manejamos, el tipo de casa que compramos, hasta la carrera que elegimos.
¿Estarías de acuerdo en decir que las personas hacen las cosas más increíbles para ganar aceptación? Recuerdas que de chico deseabas de una forma tan intensa pertenecer al grupo que alguien decía “A que no haces...” y tú terminabas haciendo algo estúpido. Lo hacías porque tu deseo de ser aceptado pesaba más que tu deseo de tu propia seguridad. Cuando jugabas al beisbol de niño y se elegían los equipos,
¿Recuerdas que bien se sentía el haber sido elegido por el mejor jugador? ¿Recuerdas que feo se sentía cuando solo quedaban dos o tres y todavía no te elegían?
Nos encanta sentirnos aceptados.
Ser escogidos hace cosas tremendas en nuestra autoestima. 1 Pedro 4:9 “Pero ustedes son linaje escogido (NVI) Cristo te ha aceptado – no basado en tu desempeño, no es algo que tu te ganaste o que te mereces. Dios simplemente dice “Yo te elijo”.
Tal vez hayas aceptado a Jesús en tu vida, pero ¿te diste cuenta que Cristo te ha aceptado a ti? No tienes que aceptarlo; no tienes que probarte a ti mismo.
“Aunque mis padres me abandonen, el SEÑOR se encargará de mí” (Salmo 27:10 Palabra de Dios para Todos).El hecho es que muchos de ustedes tiene padres que nunca serán complacidos. No importa lo que hicieras, nunca era suficiente. Si obtenías una C, ellos querían una B, si obtenías un B, ellos querían una A. Si obtenías una A, ellos querían que todas fueran A.
La tragedia es que algunos de ustedes todavía están tratando de probarse a sí mismos frente a sus padres. Todavía estás tratando de ganarte su aceptación, pero, lo más probable es que nunca la consigas, si no la conseguiste hasta ahora, porque ese es su problema. La buena noticia es que es que no la necesitas para ser feliz. Hay 6 mil millones de personas en el mundo. Si no le gustas a dos personas, ¿a quién le importa? Como miembro de la familia de Dios, has sido aceptado por Dios.
Habla Sobre Esto
¿En qué basas tu autoestima?

¿Cómo te afecta físicamente tu deseo de agradar a otros? ¿Cómo te afecta emocional y espiritualmente?

No hay comentarios:

Publicar un comentario